Básicamente busca conocer el verdadero estado de salud de la persona a través de la búsqueda de padecimientos que se han catalogado como “los enemigos invisibles””. Se nombran así porque la mayoría de ellos no generan molestias o éstas pueden tomarse como “normales” y pasar desapercibidas. Sin embargo, el gran problema es que en ocasiones, cuando se descubren ya han causado daños irreversibles al organismo. Estas enfermedades son la diabetes, la hipertensión, las cifras altas de colesterol, triglicéridos o de ácido úrico (hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia e hiperuricemia).
En una revisión preventiva (“check up”) que incluye la realización de una historia clínica, exploración física y la revisión de unos sencillos exámenes generales es posible detectar de manera oportuna su presencia e iniciar con las medidas concretas para su corrección. En esta revisión es posible detectar si existen factores de riesgo coronario, lo cual está relacionado con otras enfermedades como la angina de pecho, el infarto del miocardio y la insuficiencia cardíaca, que son las principales causas de muerte en la población adulta productiva.
Profundizando y realizando alguna exploración adicional es posible evaluar el nivel de condicionamiento físico y cardiovascular de la persona, lo cual puede ser útil para realizar una evaluación más detallada en las personas que desean realizar ejercicio físico tanto a nivel recreacional como competitivo.
